Hasta el infinito comercial y sin límites

Estamos en una época especial que nos recuerda dar gracias por la
globalización. Si, sabemos que esta remarcada palabra ha traído consigo sus consecuencias y problemas (como la falta de competitividad y consumo de producción interna de muchos países), pero también hay que admitir que nos ha abierto las puertas del cielo con el acceso a infinidad de productos y servicios de todos los precios, materiales, países de origen y que cumplen con todos nuestros estándares y hasta gustos exagerados.

Comienzos del comercio

Comenzaremos recordando lo que a todos nos enseñaron: que el comercio internacional comenzó con el tráfico de especies, oro, plata y piedras preciosas; que eran transportadas por los mercaderes y que luego se vería aún más beneficiado por la revolución industrial por el motor a vapor, los medios de transporte, el comienzo de las producciones masivas, etc. Fue en este punto que el comercio se expandió a una escala intercontinental, transformando estructuras, sistemas y formas de producción nacionales, además de la economía, política, sociedad y cultura global, desarrollando los mercados internacionales y la interdependencia entre los países, teniendo en cuenta sus formas de producción y asignación de recursos (que y cuanto producir de cada bien), según las ventajas competitivas de cada país.

Ahora volviendo a nuestra actualidad:

A pesar de que podemos ingresar a cualquier tienda virtual de cualquier marca que exista sin importar la hora o lugar, lo que en su mayoría de veces –por no decir que siempre- nos detiene de comprar esos artículos que en ocasiones ni siquiera encontramos en nuestro país, son los altos costos de envíos. Pero la mejor solución a esto es el uso de un casillero virtual, que es una dirección física y real de una compañía que sirve como intermediaria para despachar tu pedido a su país de destino y por medio del cual puedes comprar en diferentes tiendas y días pero con un mismo casillero, vinculando los envíos a través de una línea de atención. Sin embargo, antes de contratar este servicio, debes tener en cuenta 6 factores clave para asegurar tus pedidos y evitar pérdidas, daños o estafas.

Aspectos para tener en cuenta a la hora de escoger un casillero internacional:

1. Evaluar la confiabilidad de la empresa y nivel de atención al cliente, escuchando experiencias de sus clientes, visitando sus redes sociales y comunicándote con su línea de atención.
2. Tener claras sus tarifas de pago, que sean por peso y NO por volumen, ni adicionen cobros por empaques, tiempo de permanencia, etc.
3. Saber el nivel de frecuencia de envíos y tiempos de entrega, para evitar demoras y contratiempos.
4. Busca empresas que no cobren membresías ni permanencias.
5. Toda mercancía se debe asegurar contra robo.
6. La atención es muy importante, por eso, contacta una empresa que te brinde un servicio personalizado y seguro.

Igualmente, hay factores legales a tener cuenta:

  • Los pedidos superiores a US$199 deben ser declarados.
  •  Pueden ingresar máximo 6 unidades de la misma referencia por envío.
  •  Algunos productos tienen restricciones, así que, consulta bien antes de comprar.
  •  Debes tener soporte de tu comprar para temas legales en la aduana.

 

Por último y más importante, recuerda siempre que hacer compras en tiendas online en Estados Unidos es fácil y seguro, si encuentras una compañía seria y responsable con precios y tiempos justos; y claro, que te entregue en perfecto estado.

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